La esposa trabajó horas extras con su jefe en el hotel para ganar más dinero para su marido.

Aoi, cuyo marido fue despedido de la empresa y está teniendo dificultades en la vida, fue a la empresa de Ozawa para una entrevista. OZAWA recomendó a AOI como secretaria a pesar de que se trataba de un reclutamiento de oficina. El salario se duplicó, pero con contrato de amante. Aunque es amante, no tiene relación física sino sólo besos. Aoi acepta esas condiciones por el bien de su vida. Sin embargo, besar a Ozawa es como aparearse entre una polla y un coño, y Aoi, que se sentía bien, rompió su promesa y pidió tener relaciones físicas con Ozawa.